"Por segunda vez", Capítulo 3, por Garrita salvatrucha

Capítulo 3

¿Eh?

-¡Tú!- exclamo la madre de Shizuru al ver a Natsuki, fijo su vista en los ojos de su hija y vio unas pequeñas lágrimas rodando por su mejilla, está mujer sí que sabía cómo lastimar a la castaña, aunque esta no la recordará…o ¿Era posible que hubiese recordado ya todo? ¡Patrañas!.

-Querido serías tan amable de llevar a nuestra hija a descansar, necesito hablar con… nuestra inesperada invitada… a solas- dijo tan amenazadoramente que Natsuki trago saliva fuerte.

-Vamos Shizuru te preparara un delicioso té.- Decía su padre mientras la "arrastraba" fuera de esa escena, una vez fuera de los oídos de Shizuru, las dos mujeres se encararon, Natsuki en realidad temía por su vida, pero debía enfrentar sus demonios, sí, su amor era sincero podía superar esta pequeña prueba.

-Kuga-san, ha logrado escabullirse entre los arbustos como astuto animal, para llegar a mi hija.- Natsuki no se ofendió realmente, en el fondo pensaba que se merecía esas palabras y más.

-Fujino-sama, comprendo pero si me dejará explicarle…- no termino de hablar.

-No Kuga-san, no estoy interesada en sus mentiras e indecisiones, estoy interesada en que deje esta casa inmediatamente y no regrese, nunca.

-Eso, no será posible, si Shizuru sigue aquí, regresaré, aquí lo que importa es lo que ella quiera… no usted, con todo respeto.- La madre de Shizuru se mordía el labio de coraje, cómo era posible que está niña osará siquiera…-

-¡Oh! Pero ese es su deseo, tendría que ser una enferma mental para querer por segunda vez a alguien como… como tú. Esos errores se cometen una sola vez.- siseaba la mayor.

-Eso tendré que escucharlo de ella- Natsuki aunque sentía hervirle la sangre no podía perder los estribos, no ahora.

-Shizuru ya no se acuerda de ti ¿no te lo dijo? Eres, pasado.- Natsuki no sabía que responder, la Sra. Había tocado una fibra muy sensible, aun resonaba la pregunta de Shizuru aquella noche, Shizuma noto la duda en la cara de la chica, tenía que acabar con esto, sentía la victoria tan cerca-

-Shizuru no te ama, cómo podría alguien siquiera, ella es una buena chica y tiene una extraño pasatiempo con las causas perdidas- Decía mientras la miraba con desprecio, se cruzo de brazos y remato- ¿Quién podría? Déjeme preguntarle algo ¿Cuándo te ves en el espejo no te da lástima?- La antigua Natsuki hubiese gritado en ese instante para después caerle encima a esa mujer y darle una buena paliza porque no le importaba nadie, pero ahora, sus prioridades eran otras.

-Sé que usted no es la dueña de Shizuru, pero también sé que ella la respeta y venera, no me gustaría que ella viera está parte de usted.- Shizuma carraspeo al escuchar esto. –Sé que hay algo diferente en Shizuru, pero quiero intentar reconquistarla, mis temores han desaparecido, he crecido, son una persona de provecho…- Shizuma la cortó

– ¡Desapareciste sin decirle nada! Tú no estabas aquí mientras ella sollozaba todas la noches, ni cuando te llamaba entre sueños, no estuviste cuando dejo de comer y calló en un cuadro depresivo, dónde estabas ¡Dónde estabas cuando mi hija más te necesitaba! – gritaba. – Ni siquiera te enteraste que tuvo un accidente, no la visitaste en el hospital, si hubiese muerto no te habrias enterado siquiera, perdió la memoria, diez años atrás de vivencias, ¡perdidos! ¡Vienes por una segunda oportunidad! ¿Cómo te atreves si quiera a pensarlo? Amo a mi hija y ver que le haces daño me parte el alma.- Shizuma cerró sus ojos pues en verdad le partía el alma recordar la causa de la depresión de su hija- Ella es tan buena, se merece ser feliz. – Sintió como unos fuertes brazos se entrelazaban delicadamente alrededor de su cuerpo, se tensó, Natsuki la estaba abrazando, mientras comprendía la razón de que Shizuru la desconociera. – Por favor, déjeme intentar hacer feliz a su hija, que sea ella la que decida… por favor. –

-No, ella no puede recordar esos días de dolor. –respondía tristemente.

-Madre ¿Qué pasa aquí?

-Shizuru, lo siento creo que he molestado a tu madre, después de todo he sobrepasado el límite de tus admiradores comunes. –Se adelantó a contestar Natsuki.

-¿Eh? –Decía Hiro confundido

-¿Eh? –Shizuma, también confundida.

-¿Eh?- Dijo la vecina chismosa, pero nadie le hizo caso.

-Fujino-san, si me he atrevido a venir hasta aquí, es para que sepa que mi amor es sincero, he venido a invitarle a cenar, sólo necesito una oportunidad, no se arrepentirá. –Shizuru en realidad estaba consternada con el cambio de actitud, sobre todo por la manera formal en la que ahora se le dirigía. –"Aquí hay algo muy extraño" –Natsuki que no escuchaba respuesta, entre en modo pánico y farfullo. –Que sea comida entonces… ¿tomar un té? ¿En tu casa? –Casi susurrando añadió. –Pero sin tus padres. –Mientras los veía por el rabillo del ojo.

-Ara, creo que… estaría encantada.

-¡Oh bueno! Qué te parece mejor un desayu…espera ¿Aceptas cenar conmigo?

-Me refería a tomar un té.

-No tiente su suerte Kuga-san. –Opinaba por vez primera Hiro.

La cita era el viernes a la hora de la comida, y sería en casa de Hiro y Shizuma Fujino, ellos así lo decidieron, teóricamente no estaría presentes, pero Natsuki presentía que usarían un truco sucio, tal vez cámaras de video.

-Espero que todo salga bien ahora que carajos usaré !???

Continuará.....