"Por segunda vez", Capítulo 4, por Garrita Salvatrucha

Capítulo 4

La cita

La cita era el viernes a la hora de la comida, y sería en casa de Hiro y Shizuma Fujino, ellos así lo decidieron, teóricamente no estaría presentes, pero Natsuki presentía que usarían un truco sucio, tal vez cámaras de video.

-Espero que todo salga bien ahora que carajos usaré !???

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Natsuki No creas que la tendrás tan fácilmente con Mi chuchu.- Shizuma, decia medianamente ausente mientras Hiro asentía.

-Además, hay algo Que Kuga esta pasando por alto,- Ambos se miraron y rieron macabrosamente. –Nosotros, dijeron entre sonoras carcajadas.

- oh Hiro más vale que pongamos cámaras.

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En su departamento Natsuki estaba MORTALMENTE nerviosa, tenia que conquistar a Shizuru, cuando en un principio ella era la que se había enamorado así nada más como por arte de magia, por buena suerte, Caramba ni siquiera sabía que tenía que hacer, solamente había asumido lo lógico, el Feng shui, los karmas, el dicho de "polos opuestos se atraen", parecía un plan pero del dicho al hecho…

-Cómo es que se enamoró de mí ¿Qué es lo que le gustó?- refunfuñaba frente al espejo.

-Ne Natsuki, porque no usas el uniforme a pu… apuesto… que la ex presidenta se volverá loca por ti – Opinaba Mai conteniendo la risa (o al menos tratando)

-No eres de mucha ayuda.

- o Puedes usar tu traje de motociclista, se ajusta a esas curvas. Babeara al instante.- Opinaba nao

Las tres chicas callaron instantáneamente, acaso Nao acababa de decir "se ajusta a esas curvas, babeara al instante" Natsuki y Mai , voltearon a donde se encontraba ella, quien al parecer se había dado cuenta de su error, porque estaba levemente sonrojada.

-¡Olvídenlo! Estoy ayudando eso debía ser más sorprendente. – Mai y Natsuki concordaron en que tenía razón.

-Ahhhh, creo que estoy demasiado nerviosa, temo ser aburrida para ella… He cambiado, hemos cambiado.

-No precisamente, sigues sonrojándote por estupideces y sigues tratando de ser una total bad ass, tienes un trabajo groseramente bien pagado pero sigues siendo, casi la misma.

-Natsuki, no te preocupes todo saldrá bien, fue una buena señal que aceptará la comida. ¿No crees?

-Si, creo que sí.

- Ahora, qué vas a usar? Preguntaba al punto del éxtasis Mai, mientras soltaba una risita. Sigo votando por el uniforme.

-Déjate de eso Mai, lo más importante es: qué le regalarás? Porque… piensas llevarle algo verdad?

-Llevarle algo? Por qué? No, no sé nada… no tiene caso, mañana que es la cita lo arreglare, ahora estoy cansada, así que… largo.

Mientras tanto en la casa de los Fujino…

Shizuru daba vueltas y vueltas en su cuarto repasaba todo lo ocurrido, era muy sospechoso el cambio de actitud de… Cómo se llama… no importa, primero actúo como si fuese una amiga de toda la vida, después, bueno después abrazo a su madre… raro… después la formalidad, después los ojos de rabia de sus padres y luego la comida, y por qué se sentía ansiosa por esa comida, por qué sus padres habían comprado tres cámaras de video micro chiquitas y lo más importante…

¿¡Por qué sus padres no se sorprendieron de que una mujer le declarara su amor de esa manera?! Si bien le sobraban las admiradoras, porque sus padres estaban tan "tranquilos" acerca de que ella aceptó la comida con una chica. ¿Era posible que tuviesen algún tipo de historia juntas o con otra chica? lo que era mucho más sospechoso era su actitud, mientras estuvo en recuperación muchas de sus admiradores fueron a verla, Shizuru podría jurar que TODAS hasta que Kuga san demostró lo contrario, ella no actuaba como las demás, no encajaba en el perfil, claramente tenia una actitud que decía "piérdete y evítame el aburrimiento" ¿por qué alguien con un carácter de "chica mala " se interesaba tanto en ella?

-Bueno, supongo que mañana lo averiguare. – y así fácilmente fue a dormir, mientras que en el otro lado de la moneda, cierta chica no dejaba de dar vueltas y vueltas sobre su cama. –Shizuru… shizuru.- Sonrío como idiota a la nada y revolvió las piernas entre las sábanas. –Mañana será perfecto.

ALGUN LUGAR CERCA DE LA CASA DE LOS FUJINO - VIERNES 14:18 HRS.

-Maldición, es tarde tarde. ¡Fijate maldito animal! –Gritaba una furiosa motociclista, a quien se le hacía tarde para llegar a su cita. -¡Quítese abuela! Use el maldito puente peatonal.-

-------Hace unas horas---------------

Natsuki estaba recién bañada y cambiándose unos pantalones casuales color caqui, paseaba por la cocina cuando diviso dos pequeños puntos rojos en su jardín caminando sigilosamente detrás de los arbusto, agarro una lata de granos de elotes y lo tiro en dirección de los puntitos rojos que se agitaron hacia los lados del arbusto para esquivarla, pero extrañamente uno de ellos cambio du dirección dr´sticamente quedando debajo de la susodicha lata. –Auh auh, Nao! Porque me jalaste hacia la lata, ya la había esquivado. –Oh mai lo siento pensé que te estaba salvando… hey kuga esa no es manera de saludar a tus amigas.

En la puerta del jardín Natsuki miraba impaciente a las dos pelirroja

-¡Qué hacen invadiendo mi propiedad¡

-Hai hai, no sé cómo Nao, me convenció de esto. –Se disculpaba Mai.

-Oh ya no lo recuerdas jum?- decía mientras le guiñaba el ojo. -Kuga puedes ponerte una blusa encima, tengo nauseas.

-Cómo sea- Contestó Natsuki caminando a su cuarto para terminar de arreglarse, se puso unas botas, su blusa azul marina, se miro en el espejo y…

-No, no queda bien. –Se quito la botas se puso sandalias y una blusa camisera blanca.

-Maldita sea no. –Se quito la blusa, las sandalias y el pantalón y furiosa se puso a buscar en su ropero.

-Parece que tienes "indecisión crónica" cachorrito. –Decía Nao, quien estaba cómodamente abrazada con Mai en la cama.

-Estas muy nerviosa Natsuki ¿Quieres que te prepare un té? –Silencio sepulcral… Carcajadas. (Nao y Mai por supuesto)

-Ara ara, creo que alguien no está de humor, jum Tokiha san semejante comportamiento es muy rudo.

-Oh rayos, alguien que me recuerde porque mantengo amistad con ustedes. –Gruñó Natsuki

-Venimos a darte apoyo moral, estás muy tensa reírte te ayudará, te vas a relajar.

-Mai, no creo poder relajarme, en este momento me siento como una gelatina, es ridículo que esté actuando como una niña de 15 años, pero no lo puedo evitar, no cuando es de Shizuru de quien estamos hablando… ahhh (suspiro amoros) podría enumerar mil cualidades de ella…

1.- Es cálida

2.- Hermosa

3.- Inteligente…

-Maldición debí detenerme cuando Mai comenzó a cabecear, pero esa maldita araña tenía que provocarme –Gruñía de nuevo.

–Qué, sólo 500, no que mil, eso es todo lo que tienes ¿Eh? ¿Eh?

-Tú lo pediste… 501.- Es generosa…

De vuelta en la realidad.

-Vamos Niño ¡fíjate!

Por fin se encontraba en la entrada principal, había optado por un pantalón de mezclilla y una blusa negra manga ¾ con cuello V. Tocó el timbre y después de unos momentos apareció…

-Shizuma sama? No se supone que no estarían ustedes. –Preguntaba entre confundida e irritada

-Buenas tardes… Ummm… oh sí… Kuga san. Lo había olvidado. –Natsuki puso cara de "Sí, claro". –Pero respondiendo la pregunta, efectivamente estábamos a punto de ir al cine, sólo tuvimos que esperarle… 20 minutos.

-No creo que a Shizuru le hubiese sido tan difícil, estar sin usted 20 minutos. –Los ánimos comenzaban a calentarse.

-¡Oh es verdad! A ella no le hubiese importado demasiado estar 20 minutos sin usted, después de todos los años que la espero…llorando. –listas para comenzar una guerra verbal, fueron detenidas por la simulación de tos, graciosamente interpretada por la manzana de la discordia.

-Ara, no quisiera quitar tu diversión, pero padre te espera en el coche, está ansioso de ver la película.

-Así es querida… NO QUEREMOS LLEGAR TARDE.

-Buenas tardes.. emmm… Kuca san ¿

-Kuga, Kuga Natsuki.

- Oh por supuesto, adelante por favor, tengo un delicioso té esperando por nosotras.

Natsuki se encontraba un tanto incómoda, habían pasado unos minutos y lo único que había hecho era tomar té mientras era observada… muy minuciosamente.

-Entonces –Comenzaba Shizuru –Nos conocemos de mucho tiempo?

-Sí, realmente somos…mmm… amigas desde la preparatoria.

-Ara ¿Amigas?

-Sí, bueno, ya sabes, tú eres amable con medio mundo, entonces sí, creo. –Los nervios eran evidentes en su manera de hablar, así que decidió tomar más té, lo que más le preocupaba era que tanto debía revelarle a Shizuru de su pasado juntas. Sabía que su comportamiento no había sido el mejor, más aparte había salido de su vida tan fácil y tan fácil quería regresar, era egoísta, y si Fujino sama tenía razón con lo el cuadro depresivo, bueno entonces eso era algo que se debía de saltar.

-Ya veo –Decía pensativa. –sabes después de que nos visitaras, tuve un presentimiento, sentí algo poco confuso, creí que… Bueno eso no importa. Creo que tendrás que comenzar de cero, me disculpo por el inconveniente. –Natsuki soltó una pequeña risa.

-Nunca sería inconveniente eso Shizuru, yo haría cualquier cosa… eh… Fujino San, quiero decir, sí eso. –Sorbía más té.

-Ah ¿Sí?

-Sin dudarlo.

-Segura ¿Me harías cualquier cosa? –Ambas chicas se quedaron pasmadas, Natsuki acababa de ser coqueteada y de manera algo sugestiva Shizuru por su parte no comprendía que rayos le pasó por la cabeza para decir lo que dijo y cómo lo dijo, primero tenía problemas para recordar el nombre y ahora insinuarse le había salido tan natural.

-Pero que descortés, disculpe mi rudeza, no sé que me pasó.

-No… problema no. –Decía mientras observaba muy interesada su tasa ahora vacía.

-Ara. ¿Un poco más de té, sí?

-Mmm sí, por favor.

En algún lugar desconocido.

En un cuarto muy mal iluminado frente a pantallas de televisión se podía observar a los padres de Shizuru sentados en un gran sofá.

-observaste Hiro, parece que el subconsciente de nuestro tesorito, le está jugando una mala pasada.

-Por suerte esa chica Kuga es bastante torpe en estos asuntos, mira sólo se quedo mirando la mesa. 

–Contestaba mientras alcanzaba unas palomitas.

-Eso es lo que más me preocupa ¿Por qué nuestra hija tiene gustos tan… excéntricos?

-Shhh, Ya regresa Shizuru.

De vuelta en casa de los Fujino.

-Aquí tiene… kuca san

-Kuga…gracias. –tomaba entre sus manos la taza cuando accidentalmente rozo con los dedos de Shizuru, se sentía tan bien la piel suave ¡oh como añoraba poder abrazar a esta mujer!, Shizuru por su parte sintió unos pequeños calosfríos pero su cara no mostro ninguna emoción.

Con la cara un poco sonrojada para deleite de Shizuru ahora era su invitada quien intentaba eliminar el silencio.

-Entonces, cómo fue el accidente?

-Fue un accidente automovilístico, según sé, pero desconozco las razones. –Le dedicó una sonrisa de disculpa, después de todo no podía platicarle muchas cosas. –Y a qué se dedica Guka San?

-Kuga, actualmente estoy en el área de investigación de un laboratorio que se especializa en Biomecánica, hace poco me dieron ese puesto.

-Vaya eso es muy interesante, Suka San debe ser una diligente investigadora.

-Es ku… Olvídalo, en realidad contribuiste mucho a eso Shizuru…emm… Fujino San.

-Está bien, por favor llámame Shizuru.

-Sólo si me llamas Natsuki. –Shizuru asintió. –Bien, como decía en realidad te debo mucho, fuiste mi inspiración.

-Ara que amable en darme el titulo.

-Es verdad, en la preparatoria todos me veían como el caso perdido, tenía unos pocos amigos pero ni ellos ni nadie podía corregir mi comportamiento, eso hasta que te conocí. –Dijo sonriendo pícaramente, de alguna manera Shizuru sintió felicidad por escucharla, en realidad mucha felicidad, era curioso ya que no era algo que le pasara muy seguido, en la mayoría de las visitas que tuvo en el hospital escuchaba historias más o menos similares les sonreía, pero no era algo que le hicieran sentirse tan feliz. El ambiente entre las dos por primera vez estaba bastante relajado habían algunos silencios pero no eran para nada incómodos.

En el lugar desconocido.

-Shizuma ¿Por qué sólo se están viendo?

-Hiro creo que es hora de regresar.

-pero apenas si ha pasado una hora, será extraño que regresemos tan rápido.

-Eso no importa Kuga San se está acercando.

Casa de los Fujino

-Sí, estaba con un pie fuera de la escuela, y a decir verdad no me importaba, fue cuando me enviaron con el consejo, varias veces había estado allí, pero sólo conocía al altavoz andante.

-Ara Natsuki es tan mala. –El nombre sí que se me quedo, pensaba. –Natsuki comenzó a reírse de esa expresión que tanto extrañaba.

-Es verdad te lo juro que parecía que tenía unas bocinas escondidas justo en el frente. –Shizuru trataba de evitar carcajearse, tenía sus dedos posados sobre sus labios para contenerse y miraba directamente a esos ojos, transmitía un reproche de manera cómica, la verdad es que no podía negar lo que acaba de escuchar ya que Haruka Susuzhiro le había regalado una visita en el hospital. Antes de que pudiese reprocharle lo rudo de su comportamiento a Natsuki, sonó el timbre.

-Ara, no esperaba a nadie, es un día de sorpresas. –Decía mientras se levantaba para abrir la puerta y... tachan!!!! Eran sus padres. Shizuru como nunca se quedó sin palabras ¿Qué hacían de vuelta tan temprano?

-Querida. –Tono feliz. – y tú. –Decía Shizuma mirando por sobre su hombro a Natsuki.

-Padres ¿Tan rápido de vuelta?

-Así es Shizuru querida, la película estaba mortalmente aburrida.

-¿Ah sí? Y ¿Cuál fueron a ver? –Preguntaba Natsuki sospechando del comportamiento de la señora.

-No recuerdo el nombre. –Contestaba tajantemente.

- ¿En serio?

-Sí, ¿algún problema con ello? –Para esto las dos ya estaba centímetro una de la otra Hiro y Shizuru sólo podían observar de un lado al otro el intercambio de palabras.

-¡Oh no en absoluto! Siempre es un placer verla. –En tono sarcástico.

-Lástima que no pueda decir lo mismo de usted temo que haya aburrido totalmente ami hija, si es que no intento algo rastrero, como de costumbre. –Shizuma no era tontita y lo último lo había dicho volteando un poco la cara y tan bajito que sólo Natsuki lo escuchó.

-¡Usted si que es una vieja entrometida¡ -Natsuki se había salido de control y ahora le gritaba a la progenitora de su corazoncito, justo lo que ella quería. Para cuando Natsuki grito Hiro y Shizuru de acercaron inmediatamente, ambos muy enojados.

-Ara me temo que no es la manera más correcta de dirigirse a MI MADRE Natsuki.- Shizuru trataba de calmar los ánimos, y más que reproche o enojo en sus palabras trataba de calmar a la chica, pero Natsuki ya estaba muy lejos del auto control.

-¡No! Está mujer nada más está metiendo sus narices donde no debe, por qué regresaron tan rápido y por qué no escuchamos que estacionaran su automóvil? ¡Estaba espiándonos, Shizuru! –Dejando lo verdadero de las acusaciones Shizuru se interpuso entre las dos y con tono severo dijo.

-Kuga san, por favor abandone nuestra casa. –Natsuki no se lo podía creer, pasó su mirada de Hija a Madre y pudo observar esa sonrisita en los labios de la mayor, había caído redondito.

-Pero Shizuru, disculpa no fue… -Shizuru podía ver la culpa en esos ojos verdes, parecía un cachorrito pidiendo perdón ¡Que lindo, tal ves no era tan grave! Pero Natsuki fue interrumpida por la villana del cuento.

-No Kuga San usted a insultado esta casa de buenos modales, con su actitud de poca monta.

-¡Usted!

-Ara creo que debe retirarse, ya. –Le espetaba Shizuru, después de todo el cachorrito no había aprendido su lección, no podía dejar que insultaran a su madre, quien la trajo al mundo y cuidaba de ella con tanto esmero, recordaba sus noches de vela en el hospital, no podía dejar que una media conocida le faltara al respeto y en su propia casa.

-Y por favor no regrese. –Decía la castaña a Natsuki, está quedo en shock por las palabras ¡No¡ Shizuru tenía que reaccionar no podía dejarle así, pero entonces lo entendió, podía darles miles de razones, pero con su madre allí probablemente voltearía todo haciendo que Sizuru se molestará mas con ella. No, esto debia resolverlo de manera distinta. Por su parte Shizuma la miraba profundamente y su cara decía como un anuncio neón "te lo dije loooser" si la Sra. no fuese tan manejada a la antigua Natsuki apostaría a que en este momento estaría saltando en un pie o sacando la lengua y diciendo lero lero, pero bueno su educación, gracias a Dios, al parecer lo impedía.-

Una idea cruzo rápidamente por la cabeza de Natsuki, se acerco a Shizuru quien solo la miraba neutralmente. Entonces dijo en voz baja de manera que solo ella escuchara.

Creo que deje mi bolso en su habitación, es el primero del pasillo, ¿Verdad?- Una ceja castaña se alzo hasta el infinito, pero rápidamente descendió y la aludida con una sonrisa respondió-

- Ara. Kuga san, mi cuarto es el último del pasillo, y más importante, no trajo ningún bolso consigo, más aún, nunca entro a mi cuarto.- Sonrisa en su lugar.

-Oh es verdad- contestaba en un tono de sorpresa increíblemente falso. – Me retiro entonces Lady- la ceja castaña arriba otra vez ¿acaba de decirme lady? Estaba justamente pensando que esa era una actitud que no parecía pegarle a a su admiradora pero una voz la saco de su pensamiento.

-Le ruego me disculpe, Fujino San he sido una ingrata a su hospitalidad, lo lamento profundamente.

 –Con eso dicho se dio media vuelta y se retiró, Shizuru a decir verdad estaba un poco decepcionada, esperaba que peleara más por ella. Después de todo se suponía que la amaba. Con un profundo suspiro cerro la puerta y fue directo a su habitación, no tenia ánimos de hablar con nadie.

Departamento Kuga…

Natsuki llego un poco desganada al departamento donde vivía, iba arrastrando los pies por el pasillo y tenia una cara francamente dramática, la cita en realidad no había salido muy bien, metió las llaves. Su cuarto estaba totalmente a oscuras, pero sintió una mala vibra que le hizo estremecerse, de pronto se escucho caerse algo en su cocina. Sigilosamente alcanzo el apagador…1… 2…3

-Quietoooo!!!- gritaba.

-Qué hay con el dramatismo, en serio Kuga un día de estos te dará una embolia cerebral por tantas acciones sin senti… wow cuidado Kuga casi me golpeas accidentalmente en la cara con esas llaves, ¿Fue accidental… verdad?- Natsuki sólo camino al sofá y se arrellanó en él.

-Entonces esta – mordisco - delás pleguntarte – tragar- cómo te fue – Decía mientra terminaba un sándwich.

- Primero, ahora cómo rayos te metiste a mi casa, segundo deja de robarme comida, tercero… - ahhhh – Dejo un suspiro largo.

-Natsuki! Cómo te fue. –Preguntaba Mai, quien venia del baño.

- ¿No saben lo que es la privacidad? Cómo entraron a mi casa.

- oh ahora tengo un duplicado – contestaba tranquilamente Mai.-

-Entonces cachorrito cómo estuvo, acaso dijo Ara Natsuki tu sonrojo ya me no provoca sueños húmedos ¿Eh?... espera… ¿Qué planeas hacer con esa lámpara? –Natsuki se había levantado lámpara en mano y mandíbula apretada, pero con suerte para Nao, Mai estaba presente.

-Ya, ya Natsuki- decía mientras le daba unas palmaditas en la cabeza, Nao no vale la pena, mejor cuéntanos que pasó. –Natsuki le dedico un groff a Nao y regreso a su modo dramático.

-Fue malo, fue fatal, podría jurar que la comida fue saboteada. Si definitivamente fue saboteada ¡Lo juro y si no, que se muera Nao! Oh que más da, de cualquier manera… que se muera.

-Saboteada por qué o quién- Preguntaba Nao ignorando completamente lo de su muerte.

-Por sus padres, quienes más.

-Entonces tenemos que emplear el plan "anti-padres"- Natsuki se interesó entonces.

- Y exactamente en qué consiste este plan –Preguntaba curiosamente. Nao alzo la vista y exhalo.

-Bueno realmente no es como que tenga un plan, pero no sé es un comienzo. Natsuki le dio la mirada "que rayos hace ella aquí" y Mai le dio la mirada "no sé"

-Bueno, yo sí que tengo un plan y necesito la ayuda de ustedes dos...

Continuará....