Autora: Marfry
Mientras Chikane se había retirado dejando a su hermana bajo los cuidados de su cuñada…
Himeko estaba entre la sombras de la reflexión.
Y no pudo evitar recordar aquellas palabras.
“Chikane: Si decidiera ayudarte, si considerara llevar a cabo ese loco plan, perdería la confianza de mi hermana y no solo eso sino hasta su respeto. Kaon jamás me perdonaría que la hubiera traicionado de esa manera, acostándome con su novia.”
Suspiró y se dijo así misma.
Himiko: -Chikane-chan tiene razón no puedo hacerle esto a Kaon-chan y menos a mi propia hermana, entre pocas palabras la que estaría faltando en todo caso sería yo y lo más probable es que Kaon-chan termine dejándome.-
Kaon-chan es mi ángel y yo debo de cuidar de mi ángel.
Llevé a Kaon-chan a la habitación, ella apenas podía moverse, a los pocos minutos comencé a deshacerme de la ropa que llevaba puesta, quería que tomara una ducha para que pudiera relajarse, pero frena mis intentos sosteniéndome una de mis manos, ella aun tenía sus ojos cerrados, pero aun así soltó de sus labios palabras que no pensé en escuchar una vez más.
Kaon: perdóname Himiko.
Al escucharla sentí cosas extraña en mi interior y como si fuera poco de un impulso logré apoderarme de sus labios…
Ella lo necesitaba y yo también…
Himiko: Estás tensa Kaon-chan… ¡Tranquila, relájate!- no sé porque pero en está ocasión solo quería que se dejara llevar y dejar a un lado las cosas que habían ocurrido en tan solo menos de una semana, quería olvidar y que ella también olvidara.
A los pocos minutos
El compás de mi mano en su sexo y otra acariciando uno de sus pechos iban unidas con el ritmo agotante y seductor… no sé si era el efecto del alcohol que había en ella, pero no me tocaba ya que estaba agitada, acalorada, abandonada a mis caricias… gemía deliciosamente en mi oído y yo sentía la presión de su cuerpo sobre el mío…
Mis dedos resbalaban dentro de su sexo con facilidad de lo mojada que se encontraba… como amo sentir su cuerpo excitado… le susurré, te amo, te amo tanto Kaon-chan… y su cuerpo se estremeció y solo me contestó con un beso…
Su boca y la mía querían comerse, es verdad que podía quedarme sin una sola gota de energía pero en está ocasión no me importaba si moría en el intento solo quería sentir sus labios, unos labios que me deseaban y yo a ella… su lengua penetraba mi boca y me estremecía… me hacía vibrar… respondí moviendo mis dedos con más fuerza y rapidez… contoneaba sus caderas y se arqueaba… gemía desesperada… y diciendo que me ama… se va a un orgasmo que la estremece toda… sus líquidos corren por mi mano…
Me dice, te amo, te amo Himiko… y me besa con gran intensidad perdiendo un poco el aire…
Kaon: ¿Amor podemos dormir un ratico?
Me dice y yo le respondo que sí, pero que se quede así, que duerma sobre mí… ella me da un beso delicioso y se acomoda un poco para quedarse dormidita… la amo tanto…
Me encanta sentir su respiración pesada tan cerca de mi piel… solo mi corazón sabe cuánto la amo y la necesito… es mi vida… amo a esta mujer como a nadie en el mundo, de verdad entre pocas palabras sí que era más que una tonta, como se me pudo pasar por la mente engañarla y con su propia hermana, sinceramente soy la peor mujer del mundo, quizás en el fondo no me merezco el amor de Kaon-chan, aunque haya hecho lo que haya hecho no puedo juzgarla…
Y sin pensar en más quedé rendida entre los sueños y los brazos de Morfeo…
Al rato…
Me despiertan unos dulces besos en mis senos… ahí está la mujer que amo lamiendo mis pechos, poseída por una excitación impresionante… baja hasta mi sexo… sus suaves besos me estremecen… me hace abrir las piernas y se adentra en mi… me hace perder el control… comienzo a gemir…
Me tapo la cara con la almohada, me la quita y me dice:
Kaon: Te quiero escuchar gemir…
Y sin más adentra su lengua a lo más profundo y me roba un gemido de placer… mi espalda se arquea con todo este placer… y ella a respuesta adentra uno de sus dedos mientras me pasa la lengua robándome la calma y agitándome por completo…
Me fascina como su lengua me recorre probándome como un caramelo… sin más me corro en un orgasmo que ella disfruta… se acerca a mi boca y me besa… sus labios saben a mí... Me encanta… quiero probarla, quiero volver a lamer su sexo como lo he hecho tantas veces…
Sin más doy una vuelta quedando sobre ella… la domino… le tomo los brazos, le impido tocarme y la beso intentando que mi boca devore la suya… lucha por soltarse, quiere tocarme pero no se lo permito… beso su cuello… lamo sus pechos… me encantan sus pechos, son deliciosos…
Hago que se acerque al borde de la cama y estando sentada ella, me sumerjo entre sus piernas para lamerla a mi gusto… para sentirla mi mujer… para sentirla mía y que cada segundo de lo que estábamos viviendo en este momento se le grabara en su mente, creo que así no volverá a engañarme ni con aquella mujer ni con ninguna otra, pero lo más importante de todo es que lo que estaba haciendo en este momento con ella no era sexo, le estaba haciendo el amor cosa que no creo que haya experimentado con aquella mujer…
Le doy pequeños besos… me encanta como gime desesperada… como me toca el cabello y lo revuelve… me concentro en hacer que se corra… quiero que se venga en mi boca… quiero sus líquidos en mi boca… su sabor es embriagador… me encanta a lo que sabe mi mujer… se corre e intento lamer sus líquidos… se recuesta en la cama y yo a su lado….
Toma fuerzas y me besa… un beso apacible, tranquilo, suave… vemos entrar la mañana… y le pregunto… -¿Amor que quieres desayunar? y me dice… -Tus besos Himiko…
Sin embargo no pude negarme a decirle lo que sus oídos necesitaban escuchar, pues ya no quería volverla a ver en el estado que se encontraba anoche, quería que su conciencia quedara en paz, quería verla tranquila sin sufrimientos…
Himiko: Kaon-chan yo te perdono… se que algo debió pasar entre ustedes para que hayan llegado a ese punto, además tienes derecho a hablar a contarme lo que sucedió.
Más bien perdóname tú a mí por haberte juzgado sin haberte escuchado.
CAPITULO 5
NOTA DE LA AUTORA IMPORTANTE LEER PARA COMPRENDER ESTE CAPITULO:
Este capítulo comenta lo que ocurrió la noche en que Chikane dejó a Kaon con Himiko.
KAON X HIMIKO
La noche del Perdón.
La noche del Perdón.
Mientras Chikane se había retirado dejando a su hermana bajo los cuidados de su cuñada…
Himeko estaba entre la sombras de la reflexión.
Y no pudo evitar recordar aquellas palabras.
“Chikane: Si decidiera ayudarte, si considerara llevar a cabo ese loco plan, perdería la confianza de mi hermana y no solo eso sino hasta su respeto. Kaon jamás me perdonaría que la hubiera traicionado de esa manera, acostándome con su novia.”
Suspiró y se dijo así misma.
Himiko: -Chikane-chan tiene razón no puedo hacerle esto a Kaon-chan y menos a mi propia hermana, entre pocas palabras la que estaría faltando en todo caso sería yo y lo más probable es que Kaon-chan termine dejándome.-
Kaon-chan es mi ángel y yo debo de cuidar de mi ángel.
Llevé a Kaon-chan a la habitación, ella apenas podía moverse, a los pocos minutos comencé a deshacerme de la ropa que llevaba puesta, quería que tomara una ducha para que pudiera relajarse, pero frena mis intentos sosteniéndome una de mis manos, ella aun tenía sus ojos cerrados, pero aun así soltó de sus labios palabras que no pensé en escuchar una vez más.
Kaon: perdóname Himiko.
Al escucharla sentí cosas extraña en mi interior y como si fuera poco de un impulso logré apoderarme de sus labios…
Ella lo necesitaba y yo también…
Himiko: Estás tensa Kaon-chan… ¡Tranquila, relájate!- no sé porque pero en está ocasión solo quería que se dejara llevar y dejar a un lado las cosas que habían ocurrido en tan solo menos de una semana, quería olvidar y que ella también olvidara.
A los pocos minutos
El compás de mi mano en su sexo y otra acariciando uno de sus pechos iban unidas con el ritmo agotante y seductor… no sé si era el efecto del alcohol que había en ella, pero no me tocaba ya que estaba agitada, acalorada, abandonada a mis caricias… gemía deliciosamente en mi oído y yo sentía la presión de su cuerpo sobre el mío…
Mis dedos resbalaban dentro de su sexo con facilidad de lo mojada que se encontraba… como amo sentir su cuerpo excitado… le susurré, te amo, te amo tanto Kaon-chan… y su cuerpo se estremeció y solo me contestó con un beso…
Su boca y la mía querían comerse, es verdad que podía quedarme sin una sola gota de energía pero en está ocasión no me importaba si moría en el intento solo quería sentir sus labios, unos labios que me deseaban y yo a ella… su lengua penetraba mi boca y me estremecía… me hacía vibrar… respondí moviendo mis dedos con más fuerza y rapidez… contoneaba sus caderas y se arqueaba… gemía desesperada… y diciendo que me ama… se va a un orgasmo que la estremece toda… sus líquidos corren por mi mano…
Me dice, te amo, te amo Himiko… y me besa con gran intensidad perdiendo un poco el aire…
Kaon: ¿Amor podemos dormir un ratico?
Me dice y yo le respondo que sí, pero que se quede así, que duerma sobre mí… ella me da un beso delicioso y se acomoda un poco para quedarse dormidita… la amo tanto…
Me encanta sentir su respiración pesada tan cerca de mi piel… solo mi corazón sabe cuánto la amo y la necesito… es mi vida… amo a esta mujer como a nadie en el mundo, de verdad entre pocas palabras sí que era más que una tonta, como se me pudo pasar por la mente engañarla y con su propia hermana, sinceramente soy la peor mujer del mundo, quizás en el fondo no me merezco el amor de Kaon-chan, aunque haya hecho lo que haya hecho no puedo juzgarla…
Y sin pensar en más quedé rendida entre los sueños y los brazos de Morfeo…
Al rato…
Me despiertan unos dulces besos en mis senos… ahí está la mujer que amo lamiendo mis pechos, poseída por una excitación impresionante… baja hasta mi sexo… sus suaves besos me estremecen… me hace abrir las piernas y se adentra en mi… me hace perder el control… comienzo a gemir…
Me tapo la cara con la almohada, me la quita y me dice:
Kaon: Te quiero escuchar gemir…
Y sin más adentra su lengua a lo más profundo y me roba un gemido de placer… mi espalda se arquea con todo este placer… y ella a respuesta adentra uno de sus dedos mientras me pasa la lengua robándome la calma y agitándome por completo…
Me fascina como su lengua me recorre probándome como un caramelo… sin más me corro en un orgasmo que ella disfruta… se acerca a mi boca y me besa… sus labios saben a mí... Me encanta… quiero probarla, quiero volver a lamer su sexo como lo he hecho tantas veces…
Sin más doy una vuelta quedando sobre ella… la domino… le tomo los brazos, le impido tocarme y la beso intentando que mi boca devore la suya… lucha por soltarse, quiere tocarme pero no se lo permito… beso su cuello… lamo sus pechos… me encantan sus pechos, son deliciosos…
Hago que se acerque al borde de la cama y estando sentada ella, me sumerjo entre sus piernas para lamerla a mi gusto… para sentirla mi mujer… para sentirla mía y que cada segundo de lo que estábamos viviendo en este momento se le grabara en su mente, creo que así no volverá a engañarme ni con aquella mujer ni con ninguna otra, pero lo más importante de todo es que lo que estaba haciendo en este momento con ella no era sexo, le estaba haciendo el amor cosa que no creo que haya experimentado con aquella mujer…
Le doy pequeños besos… me encanta como gime desesperada… como me toca el cabello y lo revuelve… me concentro en hacer que se corra… quiero que se venga en mi boca… quiero sus líquidos en mi boca… su sabor es embriagador… me encanta a lo que sabe mi mujer… se corre e intento lamer sus líquidos… se recuesta en la cama y yo a su lado….
Toma fuerzas y me besa… un beso apacible, tranquilo, suave… vemos entrar la mañana… y le pregunto… -¿Amor que quieres desayunar? y me dice… -Tus besos Himiko…
Sin embargo no pude negarme a decirle lo que sus oídos necesitaban escuchar, pues ya no quería volverla a ver en el estado que se encontraba anoche, quería que su conciencia quedara en paz, quería verla tranquila sin sufrimientos…
Himiko: Kaon-chan yo te perdono… se que algo debió pasar entre ustedes para que hayan llegado a ese punto, además tienes derecho a hablar a contarme lo que sucedió.
Más bien perdóname tú a mí por haberte juzgado sin haberte escuchado.
Tú eres mi ángel Kaon-chan.
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