Fanfic "Amor de Escuela posible continuación" Cap 20

Título:  Amor de escuela. Ojo los capítulos que publicaré en este blog los he escrito para darle una posible continuación a este fic, es decir que los primeros capitulos no me pertecen más bien corresponden es a la Autora: Asuka-chan o mejor conocida como Sonsaku y los pueden encontrar en esta dirección:

http://www.amor-yaoi.com/fanfic/viewstory.php?sid=44140 

les repito nuevamente para evitar posible confusión, los capitulos que publicaré son solo de una posible continuación.

aparte de que la autora principal ha dado su autorización para que cualquier escritor se anime a continuarlo.

Fanfic: "Chikane x Himeko" "Amor de escuela posible continuación"

Todos los derechos pertenecientes a estos capitulos de la posible continuación del fic corresponde a la "Autora: Marfry"

y los personajes corresponden a su legítimos dueños

 

 Capítulo 20

 

Solución

-¿qué? ¿Qué rayos dices?- Se sentía molesta, no quería entender la actitud, pero era de comprenderse que llegaría de suceder algo como esto tarde o temprano, pero es que acaso esta era la mejor solución? Su último recurso…Intentó no pensar más y tampoco dar motivos para iniciar una discusión a la cual sabían que a la final terminarían arrepintiéndose… sus hermosos ojos violeta ahora se habían tornado fríos, mucho más que el propio hielo y aun así la miraba con rabia.

-lo que escuchaste Himeko, creo que Haruhi estaría mejor conmigo- pronunció con palabras amenazadoras y decididas llenas de firmeza, cegada por la ira y los celos, se sintió llevar, lo que más deseaba, era dominar la situación a toda costa, sentía que para todo este problema era mejor que Haruhi estuviera con ella… era la única solución, actuar sin pensar y hablar sin sentido propio al respeto de los sentimientos de los demás… sin más observó en Himeko un rostro lleno de tristeza y lo peor del caso también de rencor.

-Como te atreves, quien eres tú para decirle semejante cosa a Himeko – terminó por levantar su voz y aun así decir - no eres quien para decidir- comentando de forma tajante sin miedo alguno, interviniendo en las palabras de la Himemiya.

-Si más, le recuerdo Matsumoto-san, Haruhi también es mi hija y no puedo permitir que mi hija vea ese tipo de cosas por parte de usted, no voy a permitir que absolutamente nadie le cree un trauma a mi hija- ¿estaría en lo correcto?

-¿Un trauma? Estas demente Chikane-chan, crees que quitándome a mi hija, te hace el derecho de manejar mi vida a tu antojo, crees que apartándome de mi hija no tengo el derecho de compartir con alguien, no soy de piedra – decía tomando pausa entre sus palabras -y tampoco tengo que recordarte que estas casada al lado de otra mujer… - respiró hondo para no recordar -y que ese fue uno de los motivos por el cual también te desapareciste, entonces no me hables de trauma, cuando fuiste tú quien le creó un trauma a mi hija al irte… y no solo a ella…-

-Oka-chan eso es ¿verdad?-

Himeko sintió un vértigo al saber que su hija estaba presenciando aquella conversación, llevó las manos a su cara e hiso el intento por respirar profundo una y otra vez, tratando de aparentar un poco de tranquilidad y de intentar sobre llevar la situación - Haru-chan- pronunciaba con cierta dificultad.

-Entonces nos abandonaste solo por otra mujer…- diciendo esto, las lágrimas comenzaron a apoderarse de su angelical rostro.

-Basta… Haruhi no digas ese tipo de cosas sin saber…Chikane-chan es mejor que te vayas…- después de todo era la mejor opción.

-Himeko tiene razón mejor vete- decía Shun-chan

-Tú no eres quien para darme órdenes- aun así insistía con voz dominante

-Si más te recuerdo soy la novia de Himeko, algún problema en eso, a la final es mejor que lo aceptes, y si quieres que te diga algo… la regaste, tuviste tu oportunidad y la perdiste, así que no vengas de la noche a la mañana a querer cambiar el mundo, como si Himeko y la pequeña Haruhi fuesen un juguete… ahora mira lo que has causado-

-Vete Chikane-chan, por favor vete. No quiero que mi hija siga escuchándote, mejor dicho no quiero escucharte.-

Chikane mantenía la mirada fija en el suelo, después volvió a ver los ojos de su hija, que ahora estaban llenos de lágrimas, sintió dolor verla sufrir y ser la causante de este rato amargo, quizás al verla llorar le ayudo a comprender. A la final terminó asiéndole daño a lo que ahora era lo más importante en su mundo, entonces ¿que fue eso que ahora estaba sintiendo?, ¿Se había convertido en un monstruo?, porque sin haberse dado cuenta con aquellas palabras destructiva, lo único que hiso fue alejarlas más, volvió su mirada a Himeko era obvio que también estaba sufriendo, pero aun así por mantener su orgullo Himemiya tampoco iba a darle el gusto a Matsumoto-san, pero no insistió más y lo mejor que podía ser para no alargar más la situación era marcharse y pensar en alguna forma de cómo reparar el daño (¿en realidad se podía?)-Me iré Himeko, pero esto no se queda así- luego mira a su hija, con aquellos ojos de arrepentimiento y dice-Haruhi lamento todo esto, pero prometo que todo esto va a cambiar, de eso tenlo por seguro-

Sin más decidió marcharse

Logra dar unos que otros pasos con cierta dificultad, no podía borrar de su mente aquellos ojos llenos de rabia

Tranquila Haru-chan, tranquila no pasa nada- le decía Himeko mientras la niña buscaba refugio entre sus brazos.

-No voy a permitir, que nadie las lastime, ni que las haga pasar por un mal momento como este.-

-Shun-chan por ahora quisiera estar a solas con mi hija, necesito hablar con ella-

-solo prométeme que esto igual lo vamos a hablar, esto no puede quedarse así, bueno ni modo iré a cambiarme, las dejo solas-



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-Entonces Ukio te pregunto nuevamente que piensas hacer? Ya nos hemos dado cuenta de que no es tan fácil de manipular-

-Eso ya lo se-

-¿Entonces?-

-Takeda-san has pasar a Naomi y déjanos a solas junto como mi esposo no queremos interrupciones-

Como usted ordene- dijo el hombre haciendo una reverencia, para luego retirarse de la vista

El esposo de Ukio se sentía ansioso de saber el siguiente paso que se daría ahora.

-Ukio Oba sama.- ase su entrada Naomi

-O Vamos Naomi no necesitas cortesía, puedes sentarte.-

-Porque mejor no vamos directo al grano?- preguntó el esposo

-Como ya lo he dicho no soy mujer de dar dos oportunidades…-

-Ukio Oba… perdone no la entiendo-

-La prueba de embarazo que te pedí que hicieras?-

Naomi dio un respiro, lamentablemente ese era el tema preciso que ante todo quería evitar, tristemente no podía dar marcha atrás, se había hecho una prueba de embarazo justo como se lo habían solicitado y lamentablemente el resultado fue negativo y ella sabia el por qué.

-No creo qu e sea buen momento para hablar de esto.-

-Naomi hemos llegado a un acuerdo no lo olvides.-

-Lo sé… pero-

-Pero qué?- pregunto Kintaro

-Es negativo- lo dijo con el mayor dolor en su alma- Oku san significa mucho para mí, entre pocas palabras la amo y ustedes lo saben, daría lo mejor de mí por ella pero ay algo que lamentablemente no puedo le puedo dar…

A que te refieres? Suéltalo de una vez y no de mas rodeo al asunto- dijo sin más con violentas palabras entre sus labios, mientras que su esposo miraba con absoluta frialdad a la rubia pues ya se temía lo peor.

-¡No puedo tener hijos!-



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-Haru-chan ya estas mejor?- preguntó Himeko

-Si un poco- “de alguna u otra forma tengo que saber, quiero una respuesta”-Oka-chan quiero ir a la escuela-

-No creo que sea buena idea, además necesitamos hablar-

-Estoy bien, lo podemos hablar luego, solo quiero distraerme un poco-

-segura-

-si-

-está bien-

Le había pedido a su Oka chan que no la acompañara, pues entonces no podría realizar su objetivo, lastimosamente por la mente de la pequeña niña pasaban una serie de preguntas y no es que fuesen entre tantas de ellas el porqué? Si no sencillamente él Como habían sucedido en realidad las cosas, necesitaba respuestas y no era precisamente de su Oka chan sino de su propia Oka san.

Sin más logro desviarse y a la media hora ya estaba allí precisamente a un paso de cruzar aquella gran puerta de cristal, cerro sus ojos y recordó aquellas lágrimas y aquellas palabras sueltas que llego a oír y llegó a ver de su Oka chan, esto le fue más que suficiente para respirar hondo y decir para sí “no permitiré que Oka chan vuelva a llorar”

Unos de los vigilantes se acercó con cierta cautela, no es que la entrada a los niños no estuviesen permitidas pero al no ver a ningún representante decidió preguntar.

-Oye niña te has perdido, donde están tus padres-

-Vine a buscar a mi Oka san-

-y como se llama tu madre? Te ayudare a buscarla- se ofrece amablemente

-su nombre es...- es que acaso era difícil pronunciarlo, si en definitiva era difícil pero debía hacerlo si necesitaba respuestas a sus preguntas – Himemiya Chikane-

- Déjate de bromas niña-

-no estoy bromeando- dijo con cierta frialdad en su rostro el vigilante no lo podía negar después de todo tenía cierto parecido a su jefa?- Himemiya Chikane es mi ¡Oka san!-