Los años pasan - Capítulo 1

Autor: Alpha


Notas del autor: Este fic es muy especial, nunca antes había escrito uno, nació una noche, fue escrito improvisadamente puesto que se escribía a medio de una conversación en el msn, dedicado a una personita muy especial en mi vida.
Genero: romántico/Lemon


Capítulo 1: Y así comenzó todo….




-Sabes que te amo, pero no como lo deseas, eres como la hermana que nunca tuve…


Recuerdo haber dicho esas palabras como si hubiera sido ayer, en que momento todo cambio tanto? No lo sé, pero aquí estoy despertándome en una enorme cama con el calor de otro cuerpo a mi lado y unos brazos que envuelven mi cintura con cariño…



----Flash back---- Unas horas antes..


-Natsuki, shizuru te esta esperando en la sala de juntas, que esperas?- Me giro y veo como soy observada con cara interrogativa por una mujer de complexión media y con un llamativo cabello anaranjado..


-oh si, lo siento estaba distraída, gracias Mai enseguida voy- Le digo mientras giro mi rostro dirigiéndome a la sala de juntas.


Mai ha sido mi amiga desde el colegio, estudio idiomas en la universidad y tengo mi voto de confianza en sus habilidades, es por eso que ahora es mi sombra en mis negocios, no sé qué haría sin ella probablemente dejaría mi cabeza todos los días debajo de la almohada antes de salir de casa, es ella quien se encarga de todas mis citas y compromisos y ni hablar hasta mi consejera sentimental.


-oh Mai lo olvidaba, si quieres puedes irte ya, nos vemos el sábado- Le digo mientras medio me giro para sonreírle abiertamente y seguir mi andar.


-Nat!!!—oigo que me grita….


De repente siento un taconeo a toda velocidad detrás mío y un tirón de en mi oreja..


--auch! Mai! Pero que haces?! No te dije q te podías ir ya? Me vas a arrancar la oreja, te la empaco para que te la lleves?--- digo con tono de gracias


-Ja Ja Ja no gracias, en casa no solemos comer sopa de oreja, no tenemos tan mal gusto – se ríe estruendosamente con tono burlón.


Luego de ese comentario suelta mi oreja y la miro con una mirada de disgusto fingida…


-Sabes Nat? Pero si te vas a disgustar…. Puedo devolverme con esta carpetita, pero no se ah que ibas a la sala de juntas sin los papeles que le llevaras a Shizuru--- Intenta dar media vuelta pero antes de eso…


-No!! Noooo, lo siento—una gota de sudor cae por mi frente, y la miro con carita de ternero degollado pidiendo disculpas.


-Ja ja está bien aquí tienes- Me entrega la carpeta en las manos y siento que de repente está reparándome.


-Qué pasa? No me mires así- me siento incomoda con su mirada de escrutinio.


- Años atrás nunca me hubiese imaginado verte vestida así, solo fue un lapsus brutus recordando viejos tiempos- Me mira como quien recuerda algo de hace mil años comparándolo con el presente, pero es verdad, no soy la misma desaliñada de hace tiempos, soy ahora una alta ejecutiva y debo mantenerme presentable para todos mis compromisos, es por eso que llevo un traje negro ceñido a mi cuerpo compuesto por una chaqueta de cuello en V con dos botones al final y una falda que me llega a media pierna, la chaqueta deja ver un moderado escote que muestra mi piel blanca y tersa y de mi cuello cuelga una pequeña cadena con un dije no muy grande, mi cabello de tono azul azabache esta suelto y finamente organizado, mientras que en mis pies llevo unos pequeños tacones no muy altos pero del tamaño perfecto para contrastar con el resto del conjunto.


-Lo se!, yo menos, pero bueno te dejo, nos hablamos- Le digo mientras vuelvo a girarme para ir con paso mas apresurado a donde estoy intentando llegar hace un par de minutos, he girado en una esquina y pierdo a Mai de vista.


Siempre tuve ambiciones pero no pensé que realmente llegaran tan lejos, no comprendo en que momento me he convertido en una persona tan importante, estoy tapada en dinero, soy accionista de diversas compañías y soy una de las dueñas de la productora de cine más importante de la actualidad, amo mi vida pero debo confesar que no me gusta ser perseguida a veces por los medios, preferiría tener una vida menos publica, pero así son las cosas y no me disgusta para nada ser una de las solteras más codiciadas de la ciudad… mi debilidad, las mujeres.


Abro una gran puerta de madera y me encuentro en una gran sala con un ventanal gigantesco que cubre toda la pared del ala derecha, y en todo el centro una gran mesa de vidrio, es un lugar sencillo pero elegante acoplado especialmente para las juntas con todos los directivos más importantes de la compañía.


Y allí esta ella… sentada el final de la mesa leyendo unos papeles, cuando siento que alza su rostro y me mira directamente con esos ojos color rubí que me atraviesan de lado a lado pero una cálida sonrisa que me hace sentir tranquilidad se ve reflejada en su rostro.


-Nat, te estaba esperando- lo dice mientras con la mirada me hace señas para q me siente en la silla que esta junto a ella, camino a paso lento mientras llego a su lado y extiendo la carpeta q reposa en mis manos.


-Necesitaba estos papeles, había algo que debía revisar antes de que nos fuéramos, la reunión de hoy fue extensa y estoy cansada- me mira con cara de cansancio mientras se lleva una mano al cuello- Mai ya se fue?-


-Si esta aquí desde muy temprano preparándolo todo, le dije que ya se podía ir, nos vemos el sábado con ella- al ir hablando mi cuerpo se dirige automáticamente a servir un par de whiskys.


Para entonces shizuru se ha incorporado de su asiento y ha trasladado una de las sillas en posición que al sentarse pueda quedar observando la hermosa vista de la ciudad que da aquel ventanal, ha anochecido y estamos ubicadas en el último piso de un enorme edificio donde está la sede principal de nuestra compañía, digo nuestra porque es Shizuru la otra dueña mayoritaria de esta, ha sido desde siempre mi mano derecha, la persona que más me conoce en este mundo, no hay nada de mí que ella no conozca, ni nada que yo no sepa de ella, somos inseparables, siempre la he querido como una hermana… o no?


Shizuru se sienta en dicha silla y se relaja mientras se pierde contemplando el panorama, así que aprovecho y bajo la intensidad de la luz de la habitación para que ella pueda observar mejor las luces resplandecientes de una ciudad que se dispone a descansar de las labores de todo un día. Ella suele repetir esta situación siempre que hemos tenido un día agotador y ha finalizado con una larga reunión donde cerramos con broche de oro un contrato que nos asegurara muchos ceros a la izquierda, como dije ahora no sé cómo hemos llegado a estas alturas a nuestros escasos 30 años de edad pero sé que no lo hubiéramos hecho si en todo momento no nos hubiésemos apoyado siempre como lo hemos venido haciendo al son de hoy.


Me he aproximado lo suficiente a ti para susurrarte por detrás - estoy muy feliz de q aun sigas en mi vida luego de tanto tiempo y q hubiésemos logrado tantas cosas juntas, hay q celebrarlo- Le digo mientras extiendo el vaso de whisky y siento como se ha estremecido levemente por mi anterior acto.
Doy la vuelta mientras te dirijo una sonrisa, ahora estoy parada frente a ti y me miras fijamente, entiendes perfectamente que es lo que hare, así que te acomodas en el asiento mientras me siento en tus piernas y me recuesto un momento en tu pecho, siempre me ha gustado sentirte así, eres como un ángel guardián que esta día y noche para protegerme.
Ya no puedes oponer resistencia a mi estado de fragilidad instantáneo asi que tienes nada que pones el vaso de whisky en el piso y me abrazas por la cintura mientras aspiras el olor de mi cabello.




-sabes Shiz? hace ya muchos años que paso lo que paso en aquel paseo con tus amigos, no sé porque recuerdo esto ahora pero… no lo he olvidado, lo recuerdas?- Aunque soy yo la que evoco la situación no puedo evitar sonrojarme brevemente y voltear mi rostro para mirar tu rostro…


Me inclino tenuemente y acerco mi cara a la tuya.


-No extrañas aquellas caricias?- una de mis manos se ha dirigido a tu rostro y ahora es acariciado por el dorso de esta, no sé porque hago esto pero me estoy dejando llevar mientras siento que mi corazón empieza a subir el tono de sus palpitaciones.


Es inevitable que tus mejillas se tiñan de un pequeño tono rosa y trates de mirar al horizonte por encima de mi para q no note tu repentino cambio de color…mientras, yo aprovecho para acercarme a la porción de tu cuello que ha quedado descubierto mientras te digo:
- Porque yo no he olvidado tus caricias, jamás lo hice, nadie me ha tocado como tú, con esa devoción, tu delicadeza, ese amor, pero a la vez tan segura y pasional- Mientras digo esto me he acercado lo suficiente a tu oreja para lamer un tanto el lóbulo y mordisquearlo.
Pero hay algo diferente, ya no eres una joven que deja a rienda suelta tus emociones tan fácilmente, es por eso que vuelves a observarme con ternura y me dices:
-Lo sé-
Y pegas tu frente contra la mía, agarro tu rostro en mis manos mientras acaricio tu cara con mi nariz y roso mis labios por todo tu rostro, tus ojos, tu nariz… aspiro fuertemente tu fragancia, y tu cierras los ojos y te dejas hacer.
Giro totalmente mi cuerpo hacia ti y ahora estoy sentada encima tuyo pero totalmente de frete, instintivamente me aprietas más contra ti con tus manos que descansan en mi cintura.


-Nat, estas segura de lo que haces? ya no tenemos 20 años-


Abro mis ojos q ahora permanecían cerrados y aun con tu rostro entre mis manos te miro fijamente.


-Claro que estoy segura, tu lo has dicho, ya no tenemos 20 y las dos hemos cambiado mucho, si no mírate –
Fijo mi mirada en tu cuerpo, y es que para ese entonces has adelgazado un tanto lo que te hace ver más alta, años atrás no tenías esas curvas y ni hablar del resto de tu aspecto físico por algo tenemos un asesor para ello.


Has adquirido un tono rojo bermellón en tu rostro y yo adoro verte así, no es una visión que vea a menudo, suele ser al contrario. Han pasado los años pero hay cosas que nunca cambian.


- Ha trascurrido el tiempo y eres hermosa he inteligente, las mujeres te persiguen, odio tener q ver cada instante una diferente en tu cama, y parece que ninguna te sacia, aun así sigues siendo mi Shizuru, la única persona que permito q este tan inmiscuida conmigo y que me conozca tan perfectamente, la que siempre tiene esos abrazos que me hacen sentirme protegida, me niego a compartirte con alguien más, te quiero solo para mi, y no quiero q nadie más pueda besarte o tocar tu cuerpo, mi mente jamás ha sacado las imágenes de aquel día en ese paseo, y ya no puedo ocultar que muero de ganas por que me toques una y mil veces, y me hagas el amor aquí y ahora y me demuestres lo que siempre te has negado a sentir por mí.


No sé de dónde ha salido todo eso pero espero a la expectativa una señal tuya, pero sigues impávida mirando al horizonte, pensativa, y mis ojos tratan de buscar alguna respuesta en los tuyos, pero no logro ver nada.
Mis ojos se aguan levemente y reúno fuerzas…


-No quiero pensar que ya es muy tarde para esto, sé que lo has esperando por largo tiempo-
Aun sigues con tus manos en mi cintura y mi mano izquierda sube por tu costado derecho intensamente rosando parte de la espalda y refugio mi cara en tu cuello volviendo a aspirar tu olor y una lágrima resbala por mi mejilla, sientes la humedad en tu piel, es en ese instante cuando hay una reacción en ti, has cerrado los ojos y das un fuerte suspiro, abrí mi boca para decirte algo desde mi posición pero de repente me aprietas con fuerza y luego me separas de ti de un solo jalón.
Me miras a los ojos y yo te devuelvo la mirada un poco sorprendida y es que tienes una expresión que no logro distinguir, una mescla de amor, rabia y deseo, jamás me habías mirado tan intensamente como en ese instante, no de esa manera.
Acercas a mi tu rostro -Porque esperaste tanto para esto? Te has tardado en decirlo—
Y sin esperar más me besas, no esperaba esa reacción en ti, mas sin embargo no tardo en corresponderte y cerrar mis ojos mientras paso mis manos por tu cuello,
me besas con vehemencia y yo te correspondo totalmente, mi mano derecha aprieta levemente tu cuello mientras mi otra mano baja para acariciar tu espalda, te separas del beso pero no pierdes el tiempo y me dices en el oído a medida q me das pequeños mordiscos.


-Esta incomodo el asiento-


Continuara……..