Capítulo 2: No me interesa
-¿Qué haces aquí? –preguntó Shizuru apretando los dientes – Como me has encontrado…
-Soy estudiante de la facultad… - dijo Natsuki encogiéndose de hombros y con miedo a soltar la puerta- y… este es mi cuarto de la residencia.
-Imposible… -dijo Shizuru sentándose en la cama y llevándose una mano a la cabeza – creo que me estoy mareando…
-Shizuru ¿Estas…? –comenzó Natsuki acercándose a ella.
-¡No te acerques a mi Kuga! –le recriminó Shizuru – no te atrevas a acercarte más de 2 metros a mi persona porque lo vas a lamentar…
Natsuki retrocedió y se llevo una mano al pecho ¿Kuga? Ya ni siquiera usaba su nombre, parece ser que tranquilizarla le iba a costar lo suyo, sabía perfectamente que cuando Shizuru se enfurecía… era como un desastre ecológico… imposible de controlar…
-Shizuru… yo… -comenzó la morena.
-Fujino para ti, Kuga –dijo la castaña dándole la espalda- no te tomes tanta familiaridad conmigo, si te tengo que aguantar en este cuarto lo haré, pero no quiero ningún tipo de contacto contigo… no vaya a ser que te contagie algo…
-Veras yo… -comenzó Natsuki – yo lo…
-No me interesa… – dijo la chica de Kioto dirigiéndose al armario.
-Por favor… solo quiero decirte que me a… -intentó decir Natsuki.
-Te estoy diciendo que me da igual Kuga… vete con tus cuentos a otra parte –añadió sacando un casco de moto.
Natsuki siguió a Shizuru hasta el aparcamiento, en donde la castaña se montó en la antigua moto de Natsuki y se puso el casco, justo después de arrancar miró a la morena con los ojos entornados y gritó ya harta de tanto acoso:
-¡A la mierda!
Y salió de allí como alma que lleva el diablo, Natsuki no tuvo muy claro que le impresionó más, si el ver a Shizuru manejando su moto con tanta facilidad o las tres palabras unidas que formaron la última frase que “le dedico”.
Natsuki volvió a su cuarto desolada, el primer contacto había resultado más hostil de lo pensado, se veía que la chica estaba furiosa, mucho más de lo que Natsuki había esperado. Se tiró en la cama y se tapó los ojos un brazo.
[Me odia de verdad…] pensaba la chica al tiempo que se le encogía el corazón [esto va a costar mucho esfuerzo por mi parte]
Y así, pensando en lo hermosa que se veía la ex presidenta del consejo estudiantil de Fuuka y en lo bien que le había sentado ese tiempo, se dejo llevar por los brazos de Morfeo.
OoOoO
[Porque esta facultad… porque mi habitación…] pensaba Shizuru sentada en una roca.
La chica todavía sentía el corazón retumbarle en el pecho, Natsuki estaba tan cambiada… tan… guapa… tenía un no sé qué tan sexy que aún conseguía quitarle el aire, pero no podía dejarse engañar, a pesar de que en el fondo de su corazón aún la amaba con locura el odio que sentía hacía aquella chica estaba patente en su persona, muy, muy patente, apretó los puños y miró a la nada disgustada por no ser capaz de volver a vestir su máscara de tranquilidad y seguridad, realmente estaba aterrorizada… Se había pasado estos dos años intentando olvidar esos ojos verdes que le quitaban el sueño sin muchos resultados, a decir verdad… los resultados habían sido penosos y cuando por fin consigue dar un paso hacia delante aparece en su habitación y vuelve ocho para atrás…
-Este es mi castigo por lo ocurrido en el carnaval de las Himes ¿verdad? – le pregunto al aire mientras una lágrima discurría por sus mejillas y escondía la cabeza entre sus piernas – me lo merezco… realmente me lo merezco…
Shizuru condujo de vuelta a su residencia de manera tranquila, conocía a Natsuki y sabía que la chica habría tardado tres segundos o menos en reconocer su antigua motocicleta, así que tendría que pensarse alguna escusa para decirle a la morena… o simplemente no le diría nada, le pagaría con la moneda del silencio, esa misma que la chica le había dado a ella misma durante años. Aparcó la moto y muy despacio entró en la habitación, procurando no hacer ruido. Como pensaba Natsuki ya estaba durmiendo… Shizuru se acercó a ella y la observó, tenía las cejas fruncidas en claro gesto de disgusto y se la veía crispada.
[¿Qué será lo que altera tus sueños?] se preguntaba la castaña con curiosidad.
-Perdóname… -dijo la morena en sueños- Shizuru te amo…
Y así su rostro se relajo, sonrió y se dio media vuelta tan tranquila mientras Shizuru Fujino sentía que el corazón se le iba a salir del pecho, los latidos retumbaban en sus oídos y estaba segura de que en caso de haber alguien más en esa habitación lo habría escuchado perfectamente. La chica sacudió la cabeza.
[No te dejes engañar…] pensaba [ella dijo perdonarte y más tarde reconoció que no era así, olvida todo lo que tenga que ver con ella, solo es tu compañera de cuarto nada mas…]
Y con esos pensamientos se metió en la cama, pero sin darse cuenta de una cosa, la capa de hielo que cubría su corazón se había resquebrajado por una de las esquinas…
OoOoO
Cuando Shizuru despertó a la mañana siguiente sonrió, estaba segura de que todo había sido un mal sueño, sabía que se levantaría y en la cama de al lado encontraría a una perfecta desconocida, por lo que se levantó miró para allí y lo que vio la dejo sin aliento.
Natsuki Kuga se había revuelto mucho de noche en la cama, de tal manera que la camiseta que llevaba puesta se le había subido y dejaba ver el precioso conjunto de ropa interior negro de Victoria´s Secret con el cual se había quedado dormida. Además de eso tenía un brazo por encima de la cabeza y el entre el ombligo y sus partes más nobles, una pierna doblada y la otra estirada formando definitivamente una pose muy sexy sin ni siquiera pretenderlo.
Shizuru se empezó a marear y fue en ese momento en el que recordó que debía respirar, no podía perder la compostura, ella era Shizuru Fujino y nada la alteraba, pero lo que realmente la desarmo fue lo que paso a continuación, Natsuki volvió a girar, se abrazó a su almohada y dijo con voz alta y clara:
-Shizuru… no me hagas esperar más… te deseo… llevo dos años esperando esto… por favor…
La castaña abrió los ojos hasta el infinito intentando creerse lo que acababa de escuchar, ayer decía que la amaba, hoy que la deseaba… y por unos breves segundos estuve tentada a despertar a la chica y pedirle que le dijese aquello que le impidió expresar ayer, pero solo necesito recordar la escena de la piscina en Fuuka para dirigirse al baño, llenar un cubo de agua de agua fría y tirárselo por encima a la morena, quien gritó como si la estuvieran apuñalando.
-¡Se puede saber qué te pasa! –le gritó a Shizuru totalmente desconcertada – ¡qué mal pude haber hecho durmiendo!
-Ara, ara… si solo te estaba ayudando Kuga, para que se te pase el calentón… -respondió la chica con los ojos casi cerrados.
-¿Pero qué…? – Natsuki cayó en el momento que ató términos, sueño perturbador, Shizuru en la habitación, agua fría, calentón… blanco y en botella… leche: habló en sueños otra vez.
Natsuki se llevó las manos a la cabeza y se dejo caer en la cama, craso error, pues estaba empapada y terminó de mojarse aún más, no fue hasta que se levantó que Shizuru se dio cuenta de que hubiese sido más práctico tirarle una almohada, o mejor… algo que doliera y pesara mucho a la cabeza, pues el agua corriendo por el cuerpo de Natsuki, su pelo mojado y su camiseta pegada a su cuerpo era una imagen claramente perturbadora.
La chica reaccionó a tiempo y se dio la vuelta ocultando el rubor de sus mejillas al tiempo que decía:
-Yo que tú me ducharía Kuga, sino te vas a enfermar.
Natsuki se encaminó hacía el baño y cerró la puerta con una sonrisa, realmente no había perdido la cabeza, ya que cualquier persona que sonriese por que la despertasen con agua fría lo estaría, pero había descubierto algo muy interesante… Shizuru la odiaba, de eso no cabía duda, pero aún así… Natsuki seguía provocando efectos en ella claramente reveladores, aún la deseaba, de eso no había duda y la morena pensaba aprovechar eso hasta la saciedad. Esa chica sería suya, la recuperaría aunque le fuese la vida en el intento, pues se había dado cuenta de que sin ella… la vida carecía de todo sentido y color.
OoOoO
Shizuru miró la distribución de la habitación, esta era bastante amplia, al entrar se veía dos camas, al lado de cada cama una mesilla de noche y en cada lado de la habitación, había un armario empotrado, un escritorio y una estantería, lo único que las chicas tendrían que compartir sería el teléfono inalámbrico que estaba al lado de la puerta enganchado en la pared, el cual… como por arte de magia se había puesto a sonar, Shizuru descolgó el aparato se lo llevo al oído y dijo:
-Habitación de Natsuki Kuga y Shizuru Fujino.
Al otro lado del teléfono no se escuchó nada por lo que Shizuru dijo extrañada:
-¿Hay alguien ahí?
-Lo siento… -dijo una voz al otro lado del teléfono después de carraspear – discúlpame Shizuru-San es solo que me sorprendió que me cogieses tu el teléfono.
-Ara, ara… Mai-San –dijo la chica con sincera alegría de hablar con la chica – ya han pasado dos años desde la última vez que hablamos, espero que estés bien… si quieres hablar con Kuga se esta duchando puedo decirle que te llame…
-Eto… sí… estoy bien… – respondió Mai a quien no se le había pasado por alto el hecho de que Shizuru llamase a Natsuki por su apellido – si te parece bien apunta mi numero… verás estoy en una escuela de gastronomía en Tokio y me gustaría verla. ¿Shizuru-San? ¿Me escuchas?
Pero Shizuru no veía ni escuchaba nada que no fuera Natsuki… la chica acababa de salir del baño con el pelo mojado y una toalla que cubría lo justo, el más mínimo movimiento en falso y seguramente esa prenda ya no dejaría poco a la imaginación, sino más bien que no dejaría nada. Sin decir nada le tendió el teléfono… ahora sería ella la que se duchase, pero claramente lo haría con agua fría.
Cuando Natsuki cogió el aparato le dedico la sonrisa más dulce que fue capaz de componer, haciendo que la chica trastabillase un poco al dirigirse hacia el baño, una vez que la puerta se cerró, Natsuki pregunto:
-¿Diga?
-Natsuki por el amor de Dios… ¿Qué está pasando? ¿Qué hace Shizuru en tu habitación y que le has hecho?
-Bien… -dijo Natsuki con una sonrisa- por obra del destino y la burocracia ambas compartimos habitación y querida Mai… en el amor y en la guerra todo vale… así que mis acciones me las reservo… ahora dime… ¿A qué debo tu llamada?
-Estoy en Tokio… -dijo la chica – al final me decidí por una escuela de cocina, quería invitarte a cenar a mi casa esta noche cuando termines las clases, por supuesto también puedes invitar a Shizuru, sé que a ti te odia, pero yo no le hice nada y ella siempre es muy correcta, por lo que seguramente aceptara la invitación.
-Me parece una gran idea, espera que cojo papel y bolígrafo para apuntar tu dirección… -dijo la chica - ¿Y qué vamos a cenar si se puede saber?
-Ramen… -dijo Mai – quiero perfeccionar mi técnica…
Tras intercambiar un par de frases más, la chica colgó el teléfono y empezó a quitar de sus maletas toda su ropa, especialmente la lencería la cual la guardó con mucho esmero, llevaba diez minutos en ello cuando escucho a Shizuru detrás de ella.
-Kuga… te agradecería que a la próxima dejases toalla en el baño y no me obligaras a salir así, gracias…
Cuando Natsuki se dio la vuelta comprendió su desventaja, si ella era la maestra de la seducción… Shizuru era Dios… la chica salió del baño como su madre la trajo al mundo, provocando que la mente de la morena de colapsara mientras las veía caminar al armario, coger una toalla y envolverse con ella.
-Tú… Mai… Ramen… -consiguió articular Natsuki a duras penas.
La chica levantó la ceja izquierda de manera interrogante, recordándole a Natsuki aquella fatídica tarde en la piscina de Fuuka por lo que se recompuso y dijo:
-Mai nos invitó a las dos a cenar Ramen después de las clases en su casa. No te preocupes, no te molestare ni te diré nada, pero a ella le hace ilusión que vayas, puesto que no conoce a nadie aquí en Tokio y su novio no llegará hasta dentro de una semana. Palabra que no te agobiare y si quieres ni siquiera te mirare, hazlo por Mai… por favor… sabes que su vida nunca ha sido fácil…
Shizuru miró a la chica que tenía enfrente con nuevos ojos, ¿realmente se estaba preocupando por Mai? La miró y asintió para después señalarla con un dedo y decir:
-Como Kuga me esté engañando le juro que traeré a Kyohime del mismísimo infierno y la descuartizara…
-No te preocupes… -respondió Natsuki asustada- va a ser una cena tranquila, sin complicaciones y sin malentendidos…
O al menos… eso pensaba ella…
CONTINUARA
11 comentarios:
Excelente capitulo me fascinó espero leer el otro muy pronto, felicitaciones ^_^.
buf buf buf!
me encanto!!
continuad por favor *_*!
ooooooo!!!
muy buen capitulo espero el otro
con ancia
waaaoooooo!!
jajajajajajajajajaja
Shizuru se la regreso bonito xDD
nueno pues espero que continues pronto esta genial xDDD
parese que shizuru la va a hacer pagar y con creces aunque hay que admitirlo natsuki se lo gano.
espero conti te esta quedando muy bien
chao
esta historia si que esta interesante!! espero la continues pronto...plissss!!
va muy buenoo n.n
escribe más por favor!! :D
felicitaciones n.n
la continuación por favor!!! *¬*
che no te cuelges!! muy bueno!
mmm alguien me puede explicar la parte de : ..blanco.botella.. leche???
jajaja Blanco y en botella... leche, viene a decir que esta clarisimo... normalmente si te encuentras una botella con un liquido blanco, lo primero que piensas es... leche!!!!
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