Convivencia

Aquí un fic de lacroixmich enviado por Jen.

DISCLAIMER: los personajes que aparecen en esta historia no me pertenecen, son de sus respectivos autores.

Este ff no es mío, es de una persona que tuve el placer de conocer, es una escritora en otro lugar de ff, la cual me dio el privilegio de publicar su ff en esta pagina espero les guste y dejen sus comentarios.

CONVIVENCIA

-¡Te juro que ya no la soporto! Solo habla de trabajo! ¡solo piensa en trabajo! ¿y sabes que es lo único que hace? ¡Sí, trabajar! ¿Es que yo no existo?

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-¡Se pasa el día gritando! ¡Y tengo que estar atrás de ella todo el tiempo, no sabe hacer nada, solo con tocar un plato, ya lo rompe, y yo, que llego cansadísima, tengo que hacer todo! ¡No puedo más!

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-¿porqué no le dices, Haruka? No creo que sea capaz de adivinarlo

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-Yukino, dile esas cosas que te molestan, sino nunca las va a cambiar. Y salgan algún día, de seguro ella también trabaja todo el día.

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-Es que yo le digo, y ella se encierra en el cuarto, y claro después me toca dormir en el sillón.

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-¡Uff, sigo teniendo que hacer todo yo, no creas que se le va a ocurrir a ella salir juntas, no señor!

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-¿Tú la amas, verdad Haruka?

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-Claro que amo a Haruka, Natsuki... Sino no intentaría solucionar las cosas

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-Sí, Shizuru, la amo, y demasiado quizá...

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-Shizuru, ¿ustedes nunca tienen discusiones?
-Ara, ¿quieres saber por mi experiencia? Tenemos sí, Haruka, pero...

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-hablando la gente se entiende, Yukino, y ¿sabes? Las reconciliaciones tienen una parte genial

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-Sos una pervertida, bubuzuke!
-No, para nada, es la vida de pareja... Y Natsuki es tan...
-Bubuzuke!
-Fufufu
-¿Entonces que hago?
-Reconquístala y escúchala, Haruka...

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-Hablá con ella, tranquila, en un ambiente relajado, explícale tus sentimientos, ella te entenderá, y juntas podrán salir adelante.
-Gracias, Natsuki
-¿Agradecer? Para nada, en ustedes está la decisión

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-¡Amor, ya llegué!-saludó Natsuki al cerrar la puerta de entrada de la casa.
-¡Estoy en la cocina!-anunció la ojirubí al escuchar a su prometida.
-Hola-saludó nuevamente abrazando por detrás la cintura a Shizuru, dándole un beso en la comisura de sus labios- ¿Cómo está Haruka?
-No tan bien como nosotras, ¿y Yukino? - preguntó Shizuru mientras servía la cena en los platos y la ojiverde comenzaba a arreglar la mesa.
-Igual... Pero siempre pasa eso al principio, ¿no? Más que nada como son ellas -Contestó colocando cubiertos, copas, vino... Y mayonesa.
-Natsuki, a la mayo no le queda muy bien el salmón -agregó Shizuru con el ceño fruncido
-¿No sería al revés? Que al salmón no le queda bien la mayo?-preguntó divertida señalando al diferencia mientras colocaba los platos sobre la mesa
-No en el caso de mi Nat-su-ki, fufufu
-Baka!
-fufufu! ¿Vamos a comer?-dijo sonriente la castaña yendo hasta la mesa, y sentándose tras la aceptación de Natsuki
-ahmm, ¿Shizuru?-preguntó luego de cinco minutos en silencio
-¿Si?-contestó levantando la vista
-¿Por qué hiciste salmón? -Cuestionó la peliazul mirándola intensamente.
-Ara, ara, ¿mi Natsuki me descubrió?
-¿Desde cuándo es necesario la comida afrodisíaca?
-No lo sé, pero mientras hablaba con Haruka hoy de sus problemas maritales, se me ocurrió que vendría bien una comida ligera.
-Interesante-Dijo Natsuki sirviéndole vino a la ojirubí y luego a si misma- ¿te parece si brindamos?
-Me encantaría, ¿por qué quieres brindar? -aceptó Shizuru tomando la copa y sosteniendo a la altura de su hombro cerca de la copa de la ojiverde.
-Por nosotras, por los dos años de casi-casadas -diciendo lo último entre risas-porque nuestra convivencia es perfecta y...
-por el destino-dijeron ambas al mismo tiempo chocando sus copas
-por casualidad no habrás puesto champagne en el frízer, ¿verdad?-preguntó Natsuki luego de tomar un trago de su copa
-Ara, ¿tanto me conoce mi Natsuki?-contestó nuevamente con otra pregunta la ojirubí, mirándola intensamente.
-wow... Bueno, voy a sacarlo y arreglo el cuarto, ¿te parece?
-Claro, yo levanto la mesa -aceptó dándole un beso en la mejilla.
Shizuru la miraba divertida mientras la peliazul iba de un lado a otro y finalmente sacaba el hielo del frízer para ponerlo luego junto al champagne en una hielera.
No habían pasado ni cinco minutos cuando la chica de Kioto sintió los fuertes brazos de su novia presionando su cintura con pertenencia desde su espalda, de tal manera que podía sentir sin reparos los senos de la peliazul, y esto, irremediablemente, encendía de a poco su lujuria. Y aún más, cuando ella comenzó a besar el lóbulo de su oreja. Ninguna de las dos había dicho una palabra, pero se podía sentir los latidos apresurados y la respiración acelerada por la creciente excitación, sobre todo cuando Shizuru se dio vuelta, quedando frente a frente de su amante, y de manera torturante se acercó a sus labios, besándolos casi en roces, y cuando Natsuki, presa de la excitación, sujetó a la ojirubí dejándola sobre la mesada de la cocina, donde llevada por el deseo le quitó la ropa casi a tirones mientras besaba y mordía, pero sin dejar marcas. Todo estaba ocurriendo frenéticamente, Shizuru ya estaba desnuda, y sus gemidos empezaban a inundar la habitación, debido a que Natsuki estaba lamiendo violentamente sus pezones de manera alternada, mientras su mano derecha invadía la intimidad de la castaña, dándole especial atención a su clítoris.
-Nat… Natsu… Natsuki… Cuar…to- balbuceó la ojirubí dentro de su excitación.
La motociclista no respondió y se limitó a levantarla de la mesada, Shizuru se aferró a la cintura de su amada con sus piernas, y con mucha suerte lograron llegar al cuarto sin caerse ni golpearse a ninguna pared, ya que Natsuki aún seguía brindándole placer.
Natsuki soltó a Shizuru, tirándola sobre la cama de dos plazas, una luz tenue las iluminaba, y Shizuru pudo ver los ojos esmeraldas de su novia reflejando el deseo cuando se detuvo a centímetros de sus labios con los ojos abiertos, mirándola intensamente. La castaña se sentía delirar, su novia estaba predispuesta a provocarle un orgasmo escandaloso, y no la dejaba ni sacarle un poco de su ropa. Al poco tiempo de estar en su cama, su cuerpo sufrió una fuerte convulsión, no pudo evitar gritar de placer y luego se desplomó sobre ella exhausta.
Sintió como Natsuki se tumbó a su lado, cansada también, unos segundos después sintió la cama moverse, y pudo oír como Natsuki servía dos copas de champagne, pues aun no lograba abrir sus ojos.
-Shizuru
-ahmm?
-toma
Abrió sus ojos y vio como Natsuki le tendía una de las copas con la dorada bebida, por lo que se sentó sobre la cama, y chocó la copa que la peliazul mantenía cerca de ella. Luego del brindis ambas bebieron un trago, Natsuki dejó la copa en la mesa de luz y se apoyó contra el respaldo de la cama mientras veía como Shizuru se acercaba a ella gateando.
La de ojos verdes intento besar a la chica de ojos rojos que se hallaba a centímetros de ella, sin embargo se encontró con que la otra movió su cabeza hacia atrás, evitando así el beso, y en cambio tomó un nuevo trago de su copa, y se acercó a Natsuki. La última abrió sus labios conociendo el propósito de su amada, y así el líquido dorado se coló en su boca, siendo compartido por ambas mientras se besaban intensamente.
Las manos de Shizuru se acercaron al cuello de Natsuki, haciendo profundizar el beso, luego bajaron por sus hombros hasta los botones de la camisa, que empezaron a desabrochar con rapidez, le quitó la camisa hasta las muñecas, donde la sujetó fuertemente en la espalda de la ojiverde para que no pudiera usar sus manos. Ambas sonrieron traviesas en el beso, una por "venganza", y la otra, sintiendo lo que había provocado ella misma. La chica de Kioto continuó con su trabajo, separándose del beso, desabrochó el pantalón de vestir de la peliazul, y bajó lentamente mientras acariciaba la piel desnuda, mientras se miraban a los ojos, sintiendo cada una la lujuria que embriagaba a la otra.
Finalmente, luego de quitar completamente el pantalón y la ropa interior de la motociclista, Shizuru volvió a unirse a los labios de su compañera, pero sin detenerse demasiado tiempo, bajó por su cuello hasta sus senos, lamiendo, besando y mordiendo suavemente, provocando suaves gemidos en Natsuki. Cuando hubo excitado lo suficiente los pezones de la peliazul, dejándolos erectos, Shizuru se apartó unos centímetros, mientras su mano derecha seguía acariciando a su novia, dirigió su izquierda hacia la hielera donde estaba el champagne y sacó un cubo de hielo. Natsuki que había abierto sus ojos al notar la separación de la castaña, ahora la miraba a los ojos con lujuria y pidiendo compasión. Shizuru le sonrió y comenzó a recorrer con el hielo el mismo camino que antes había recorrido con su boca, pero ahora bordeando los senos de Natsuki y dejándolo unos segundos sobre los pezones erectos, para luego besarlos, haciendo que de a poco los gemidos de la peliazul fueran subiendo su volumen. Siguió viajando por el cuerpo de su novia, más hacia el sur, haciendo curvas con el hielo y bebiendo luego el líquido que quedaba sobre su piel. Una vez que el cubo se derritió completamente tomó otro y lo puso en la intimidad de Natsuki, la cual empezó a maldecir y gemir descontroladamente, y Shizuru unió sus sexos, que dando el hielo en el medio. La fricción no se hizo esperar, los sonidos que salían de sus gargantas ya eran casi gritos, Natsuki había logrado liberarse del nudo en sus muñecas y ahora arañaba sin piedad la espalda de la ojirubí al sentir el orgasmo demasiado cerca, y demasiado fuerte.
Finalmente, al unísono sintieron la corriente de placer recorriéndolas enteras y tras un intenso grito, cayeron exhaustas, Natsuki sobre la cama y Shizuru sobre la peliazul.

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-Natsuki! ¿Cómo estás?-saludó Yukino al ver acercarse a la motociclista a su mesa del bar.
-Excelente, gracias Yukino, ¿y tú? ¿Cómo resultó todo? –Contestó una vez sentada Natsuki, mientras alzaba su mano para llamar al mozo. Éste se acercó y pidió la orden de ambas, una vez él se fue Yukino contestó.
-Súper! Haruka se está comportando de una forma tan atenta! No es la misma desde que habló con Shizuru
-Entonces, ¿hablaron o no?-preguntó Natsuki mirando los ojos brillantes de su amiga
-Sí, claro… Y pudimos llegar a un acuerdo… ¿Sabes que a ella le molesta que trabaje tanto? Así que al siguiente día habló con mi jefe, ¿puedes creerlo? Se presentó como mi abogada y consiguió que mi jefe me retirara algunas horas de trabajo, y hasta días libres! –Anunciaba contenta, con la mirada llena de amor, orgullo y agradecimiento.
-Oh, eso es genial-contestó entre risas la peliazul mientras veía al mozo acercarse con su pedido. Éste les sirvió y se retiró luego. Y Natsuki preguntó sonriente- así que ahora están bien?
-Sí, genial! –contestó animadamente mientras comenzaba a comer
-Así que las ojeras ahora son por eso-comentó provocando el sonrojo de la morocha.
-Ara ara, no nos esperaron-dijo una voz al lado de ellas que reconocieron al instante
-me parece Shizuru que vamos a tener que buscar una mesa para nosotras solas, ya no les interesamos-agregó Haruka haciéndose la enojada pero sonriendo.
-Claro que las esperábamos, pero el hambre no-contestó la peliazul, que realmente se había olvidado que ellas llegarían luego.
-Fufufu, no sé por qué creo q mi Natsuki me está mintiendo-Contestó riendo mientras se sentaba al lado de su novia, al igual que Haruka del lado opuesto.
-En parte es verdad, perdón Shizuru, estaba en la luna y me olvidé completamente-confesó ante la intensa mirada de color rubí, luego volvió a alzar su mano para llamar la atención del mozo que rápidamente vino a pedir la orden de las recién llegadas.
-Yukino, Haruka me contó de camino a aquí que logró quitarte un poco de peso en el trabajo-comentó Shizuru mirando a la chica de lentes.
-Sí, así es, no es genial mi Haruka? Contestó mientras abrazaba el brazo de la rubia, haciendo que la mirara a los ojos de intensamente y sonriente, provocando un nuevo sonrojo en la morocha. Reacción que enterneció a la otra pareja.
-Natsuki, extraño mucho el hacerte sonrojar en público, me parece que volveré a esa interesante costumbre- Comentó Shizuru mirando traviesa a su novia mientras hacía circular una mano hacia el centro de la peliazul. Cosa que hizo reaccionar a Natsuki y saltó en la silla, e inmediatamente su rostro se tiñó de rojo
-Baka! –gritó mientras sus acompañantes reían divertidas.

FIN

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¡Hola gente!

Bueno, aquí les traje un nuevo ShizNat lemonoso… Sí, mi primer lemon…
Quizá puede verse como una continuación al ya terminado " Te esperaré", pero en este caso Haruka es abogada, y hace poco que es pareja de Yukino, en cambio Shizuru y Natsuki ya tienen tiempo de novias y prometidas…
Saludos

M.L.